Una auditoría de la Contraloría a la Cámara de Representantes, descubrió que ésta sacó a subasta pública un lote de 77 carros que según las tablas del Ministerio de Transporte, tendría un valor inicial de 2.026 millones. Pero este precio se rebajó 886 millones por mantenimiento, de 267 millones por vicios ocultos; por otros descuentos, 270 millones; por chatarrización 8 millones y medio, y por reajuste al avalúo 49 millones, para un valor final de 659 millones.
La Cámara de Representantes habría vendido 77 carros a mitad de precio. La Contraloría general encontró que los vehículos y camionetas con blindaje de propiedad de la corporación, se subastaron por $659 millones. Aunque su valor era de $1.272 millones.
“El primer error fue no haber hecho un diagnóstico previo real para saber en qué estado están los vehículos”Carolina Carrillo, directora administrativa de la Cámara
A la empresa que contrataron para gestionar la venta de los 77 carros, Comercializadora Nave, le entregaron los vehículos con una serie de descuentos.
“Eso no tiene por qué ser. Porque la idea es que si yo tengo el dinero para arreglar el carro y el carro posteriormente queda en perfecto funcionamiento, yo lo dejó dentro del parque automotor”, dijo Carrillo.
Además, le descontaron otros $538 millones por conceptos denominados “vicios ocultos” y “otros descuentos”, que no se especificaron y que para la autoridad fiscal no tenían justificación.
El daño patrimonial que identificó la Contraloría General asciende a $654 millones. Por eso inició un proceso de responsabilidad fiscal, para identificar qué funcionarios fueron los autores de esas deducciones.
Carrillo indicó que “cuando ellos digan que hay un responsable fiscalmente, la Cámara de Representantes tendrá que repetir contra la persona que no hizo lo que tenía que hacer”.
El contratista Comercializadora Nave, fue seleccionado bajo la anterior dirección de la administración de la Cámara de Representantes.
Fuente: Noticias Uno La Red Independiente
