Adriana Ruiz les hizo declaraciones de renta y atendió en su spa a cabezas de ‘oficina de Envigado’.
Foto: Archivo particular
Adriana Lucía Ruiz Madrid aparece en registros federales como la gerente financiera de la ‘oficina de Envigado’.
Desde hace dos años, la contadora pública Adriana Lucía Ruiz Madrid aparece en registros federales como la gerente financiera de la ‘oficina de Envigado’, el aparato criminal de la mafia que opera desde hace tres décadas en Antioquia. Además, agentes federales vinculan a la mujer con una gigantesca red que financia y le lava dinero a esa organización y que tiene nexos con el equipo Envigado Fútbol Club, también ligado al narcotráfico.
De hecho, la información recaudada por la DEA sobre las actividades de Ruiz fue suficiente para que el Departamento del Tesoro la incluyera en la llamada Lista Clinton, en noviembre del 2014, como una de las cabezas del entramado financiero que alimenta a esa poderosa banda criminal.
A través de seguimientos y rastreos la DEA estableció, por ejemplo, que la contadora paisa le elaboró declaraciones de renta a Daniel Mejía, alias Danielito, uno de los más sanguinarios líderes de la ‘oficina’. Entre sus clientes también estaba Nelson Isaza Sánchez, alias Nene, exjefe de Tránsito del municipio de Envigado y hermano de Félix Isaza, segundo al mando de la ‘oficina’.
La salida
Pero hace dos semanas, bajo absoluta confidencialidad, la contadora fue retirada de la Lista Clinton, a pesar de que también hay pruebas de que Jairo Ochoa, alias Natilla, señalado jefe financiero de la ‘oficina’, frecuentaba Carytes Encanto y Belleza, un lujoso spa de la propiedad de la contadora localizado en el centro comercial Oviedo, de Medellín.
EL TIEMPO ubicó a Ruiz y esta aseguró que su remoción de ese listado nada tiene que ver con delaciones o colaboración con la justicia.
Por el contrario, sostiene que, en reuniones con agentes de la DEA y de la Ofac, pudo probar que cuando les elaboró las declaraciones de renta a ‘Danielito’ y a ‘Nene’, estos eran simples trabajadores de la Oficina de Tránsito de Envigado y que los documentos tributarios fueron elaborados con base en papeles e ingresos legales.
La contadora aparece en documentos tributarios de ‘Danielito’ desde 1997 hasta el 2006, año en el que el capo salió de la cárcel de La Ceja luego de desmovilizarse como paramilitar y aprovechando que no tenía órdenes de captura en su contra. Después, ‘Danielito’ fue asesinado y su cuerpo, derretido en ácido.
En cuanto a ‘Nene’, Ruiz aparece elaborándole su declaración del 2013 y del 2014.
“Terminé implicada en esto por mi perfil de contadora. Tengo que respetar la reserva tributaria, y solo le puedo decir que ‘Danielito’ era guarda de tránsito y amigo de juventud. Yo trabajo con documentos legales, y a él se le liquidó su declaración con base en su sueldo, al igual que a Nelson Isaza, que solo tenía el cincuenta por ciento de una casa”, explicó Ruiz.
Sobre ‘Natilla’, dijo que se trata de un ganadero de la región: “Solo iba a mi peluquería a hacerse los pies y las uñas. Y una vez llegó a una reunión social a la que yo asistí. Gracias a mi abogado, Luis Guerra, y al investigador privado Wilton Hernández, le probé a Estados Unidos que yo no era la gerente financiera de la ‘oficina’ ni tengo nexos con el equipo Envigado Fútbol Club”.
Al respecto, a ‘Danielito’, uno de los clientes de la contadora, lo acusan de haber asesinado, en julio del 2006, a Gustavo Upegui, señalado narco y otrora dueño de ese equipo.
EL TIEMPO consultó bases de datos de la Ofac y, en efecto, el 4 de agosto aparece una anotación en la que se retira a la mujer de la Lista Clinton. Según Ruiz, mientras logró su exclusión, tuvo que vender el spa y perdió su casa, porque los bancos que cerraron cuentas y créditos y no pudo pagar la hipoteca.
“Soy madre cabeza de familia, tengo una hija y veo por mi madre y mi hermana, quien enfermó. Me trataron como a una delincuente. En un viaje que hice a Cancún (México) me detuvieron, me quitaron el pasaporte y me deportaron a Colombia. Lo único que me quedan son deudas, y la decisión es volver a empezar”.
Agentes federales se abstuvieron de hablar del tema y solo anunciaron que avanzan procesos contra los jefes de la ‘oficina’.
Fuente: UNIDAD INVESTIGATIVA
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