Un audio conocido por Semana Sostenible da cuenta de posibles nombramientos por palanca y presiones para renovar contratos con condición de que funcionarios salgan del sindicato.
La Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) es una entidad que siempre ha estado en el ojo del huracán y no solo por la polémica adjudicación de licencias ambientales. Días atrás se denunciaba la posible vuelta de Fernando Irgeui a la dirección de la entidad en detrimento del recién nombrado Rodrigo Suárez por presuntas presiones de Cambio Radical y Germán Vargas Lleras. Esos rumores se unen a la investigación realizada por Semana Sostenible en la que se denunciaron problemas graves al interior de la autoridad como la aceleración del proceso de licenciamiento a través de las llamadas ‘licencias exprés’; los cambios en la condiciones laborales de los empleados, que pasaron a un modelo de pago por prestación de servicios a un pago a destajo; y falta de visión de la directiva.
Ahora un nuevo escándalo rodea a la entidad gracias a un audio que llegó a manos de Semana Sostenible en el que se dan manejos turbios al interior de la entidad como nombramientos por palanca y presiones para renovar contratos con condición de que funcionarios salgan del sindicato.
En el audio que presuntamente fue grabado el jueves 7 de enero de 2016 en la oficina de la Subdirección de Evaluación y Seguimiento, presumiblemente intervienen Liliana Rincón (asesora de la subdirección y que habla en nombre de la administración) y una contratista llamada Vanessa Rodríguez. Rincón le dice a Vanessa Rodríguez (contratista) que le diga a su tío (Joaquín Rodríguez, es conductor de la ANLA perteneciente al sindicato) que debe retirarse del sindicato para que a ella le den un contrato en la ANLA y este sea objeto de renovación. “Nosotros te íbamos a ayudar a ti con la condición de que el saliera del sindicato”, se escucha cerca al minuto dos de la grabación.
Sin embargo, esto no es lo más grave ya que el nombramiento de la contratista parece haber sido por palanca gracias a la intervención de su tío quien tiene una muy buena relación con la dirección de la entidad. “(Al tío) se le hizo el favor (de contratarla) por encima de otras directivas que dijeron que no porque él es muy apreciado por la dirección” se escucha en otro fragmento. A lo que se suma, “dígale (a su tío), mientras siga en el sindicato a mí me van a sacar. Tu trabajo es excelente pero tu estás aquí por él, si uno se va a la realidad a quien le hizo el favor el director fue a él”.
De comprobarse la veracidad de esta grabación se evidenciarían varias infracciones entre ellas la contratación a dedo de ciertos contratistas y las presiones a algunos de los miembros de los sindicatos, una situación que podría llegar a configurarse en un delito penal.
Así las cosas, la Anla continua siendo una entidad llena de controversia desde su establecimiento en septiembre de 2011. Si bien el decreto 3573 de ese año prometía que la antigua Dirección de Licencias, Permisos y Trámites Ambientales fuera organismo autónomo, independiente del Ministerio de Ambiente y con un presupuesto propio que prometía una gestión transparente. Sin embargo, con el pasar de los años se ha convertido en una de las instituciones más controvertidas del sistema ambiental colombiano.
Fuente: Semana.com